Ahora no fue el presidente de la República, si no una de sus funcionarias quien se aventó la declaración de la semana: “estamos dialogando con grupos criminales, ellos quieren deponer las armas, dicen que ya se cansaron de asesinar, decapitar y extorsionar a la gente, así como del dinero del narcotráfico”, dijo Olga Sánchez Cordero, Secretaria de Gobernación, una de las más poderosas secretarias de Estado.
Su declaración nos hizo recordar el discurso aquel que pronunció hace ocho años el ahora ex presidente de México, Vicente Fox durante un foro celebrado en Washington. El panista dijo en octubre del 2011 que para lograr la pacificación del país era necesario un diálogo entre delincuentes y autoridades e incluso considerar la amnistía para narcotraficantes sí aceptaban someterse a la justicia mexicana, lo que le llevó a recibir un sinfín de críticas y condenas.
Bien, ahora es el gobierno de la cuarta transformación el que sugiere un acuerdo, a juzgar por la entrevista viralizada en medios y redes sociales, aunque como era de esperarse la simpatía que aún sostiene con el pueblo mexicano aligeró las críticas, al menos desde esta perspectiva.
No me dejará mentir estimado lector que por más disparate que el presidente se aviente, regularmente durante sus “mañaneras”, el pueblo lo arropa y condenan a todos aquellos que tratan de cuestionarlo por más “fumadas” que sean las ideas; y es así como a casi un año de gobierno Andrés Manuel López Obrador sigue manteniendo a sus adeptos, sin embargo, deberá responder a ese amor con resultados de lo contrario e lazo se romperá.
El mensaje va para los funcionarios de AMLO en Tamaulipas, pero sobre todo para la dirigencia por renovar y militancia de MORENA que no crecen de manera proporcional a la popularidad de su presidente, al contrario, sus divisiones y novatez los está borrando del mapa pues ser afín al presidente no es suficiente, muestra de ello el resultado que obtuvieron durante la pasada contienda electoral en donde fueron derrotados por el PAN aún a pesar de ser la primera fuerza de país.
Y ya viene la elección mayor.

Que Dios lo bendiga, gracias
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