A cuatro meses del asesinato del Periodista Carlos Domínguez en Nuevo Laredo por su labor de reportero, según divulgó la propia Procuraduría en su momento, otro periodista más fue victimado en Tamaulipas; se trata de Héctor González, corresponsal del Excélsior y otros medios en Ciudad Victoria cuyo cuerpo fue hallado la mañana de este martes.
Se trata de del segundo periodista victimado en Tamaulipas en lo que va del año; el número 15 desde el 2000 a la fecha según un comunicado difundido recientemente por la Comisión Nacional de Derechos Humanos en donde destaca a esta entidad en el segundo lugar nacional junto a Oaxaca en homicidios contra quiénes se dedican a la importante labor de informar, sólo superado por el vecino estado de Veracruz.
El hecho es terrible por donde se vea, independientemente de su labor y crea un gran vacío e incertidumbre entre quiénes nos dedicamos a informar. ¿Dónde están las garantías de seguridad? Ayer precisamente el gobernador del Estado previo al incidente, se reunió en esta misma ciudad capital con el Comisionado Nacional de la Policía Federal para tratar el asunto de la inseguridad que impera en municipios como Victoria, Reynosa y el Mante en donde grandes empresas han suspendido operaciones por extorsión.
Francisco García Cabeza de Vaca anunció un reforzamiento en la estrategia de seguridad ante los violentos incidentes reportados en estas tres distintas regiones del Estado.
Por cierto, hoy cumplirá agenda de campaña uno de los candidatos a la Presidencia de la República, se trata de José Antonio Meade quien sin duda tendrá que traer una reacción preparada respecto al tema de la violencia; por otro lado, esta misma semana se tiene pactada la visita presidencial de Enrique Peña Nieto a la zona sur del Estado.
Indagando sobre la última visita del todavía presidente recordamos que la última ocasión que estaría en Tamaulipas habría de ser a finales de enero para la inauguración del Libramiento Reynosa, sin embargo, la visita se pospuso hasta este viernes luego de una serie de incidentes violentos como el asesinato del primer periodista del año en Nuevo Laredo, las detonaciones en un evento público del entonces alcalde de Nuevo Laredo, hoy candidato a la reelección y enfrentamientos en Reynosa. Hoy el panorama es similar.
Por respeto a quienes realizan la labor periodística, en esta ocasión no opinaremos de debates ni de ningún otro tema político superfluo, no vale la pena.
Que Dios nos bendiga, gracias

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