Algunas personas dicen que tengo la virtud de saber escuchar, otras dicen, que en ocasiones hablo hasta por los codos, yo pienso que ninguna de las partes se equivoca, pero trato de hacer ambas cosas, de acuerdo a la necesidad de situación que se presente, de tal manera, que escucho para aprender y hablo para enseñar; pero habría que reconocer, que no todos los que pudieran escucharme encuentran en mis palabras aquello que quisieran oír; muchas veces, lo que hablo, de primera intensión, no se estima una tarea fácil de entender, y no es por el hecho de que el mensaje no sea muy claro, pienso que mi vocación de escritor, me hace adornar mi oratoria, pero aseguro que no le resta ni honestidad ni certidumbre, de tal manera que en el momento preciso, quien atiende mi mensaje, encuentra algo que en verdad puede llegar a estremecer el corazón de quien pone atención a lo que digo.
Como todo hombre de buena voluntad, mi mayor deseo es vivir en armonía con los demás, procuro no confrontarme con nadie; sólo si me lo piden doy mi opinión, y cuando opino fuera de un diálogo interpersonal, procuro no radicalizar mis ideas, siempre dejo espacio para el análisis y la reflexión. Como todo ser humano, en un momento dado puedo verme influenciado por algún cambio de mi estado anímico, de ahí que lo que diga, pudiera evidenciar algunos detalles de la emoción que experimento, pero de ninguna manera significa que estoy permanentemente afectado por algún evento emocional personal.
Un buen día me preguntaron: ¿De dónde parte la tristeza que exhibo en alguno de mis artículos? Sin duda, de todo aquello que habiendo deseado que fuera perfecto en mi vida, no lo fue, y que lamenté sólo el tiempo necesario para entender, que para ser feliz no basta cumplir a satisfacción con mis anhelos personales, la felicidad no se alcanza, hasta allegarle la felicidad a las personas que la necesitan más que nosotros.
Algunas personas dicen que tengo la virtud de escuchar, y yo escucho para poder entender lo que les pasa a los demás, y con ello brindar apoyo de corazón.
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