Hace exactamente una semana tuve el gusto de participar, al lado de destacadas y talentosas mujeres, en la presentación del libro que coordinó la periodista Yuriria Sierra, a quién agradezco su generosa invitación, y que lleva por título, como ya referí en una entrega anterior, “Presidenta: Más de 100 Mujeres te Escriben”.
El evento fue diverso, incluyente y muy emotivo, pues en el libro escriben -y estuvieron presentes en el Museo del Risco en San Angel, un espacio cálido en un lugar emblemático de la Ciudad de México- mujeres de todo el espectro político y social, de izquierda, centro y derecha, activistas de diversas causas, legisladoras, feministas, actrices, cantantes, empresarias y funcionarias públicas. El entusiasmo del preludio histórico inundó el grato ambiente.
Tuve el honor de compartir un presidium con ex secretarias de estado como Olga Sánchez Cordero, Tatiana Clouthier y Consuelo Sáizar, quién destacó el hecho de que todas las mujeres presentes en el evento, somos contemporáneas de quién, por primera vez en la historia de nuestro país, seguramente será titular del ejecutivo: Una mujer. Cuestión que no ha sucedido en democracias consolidadas, como es el caso de nuestros vecinos del norte, Estados Unidos y Canadá. América Latina parece ir a la vanguardia.
La emoción de la exitosa convocatoria de Yuriria para que más de 100 mujeres escriban sobre lo que implica que, por primera vez, llegue una mujer a la Presidencia de la República, se respiraba en el recinto así como se respira en el país. Como indicó Tatiana Clouthier, quién hizo una breve pero completa reseña del libro: Por el simple hecho de ser mujer, el escrutinio público seguramente será aún más implaclable, muestra de ello es la opinión de dos de esas cien mujeres que escriben en el libro y que abordan con profundo pesimismo la llegada de una mujer al Ejecutivo, por fortuna, continúa Clouthier, son minoría, pues la mayoría de quiénes escribimos tenemos una visión optimista, en especial en lo que se refiere al cierre de la brecha de género y a poner un ejemplo inspirador a millones de niñas, adolescentes y mujeres mexicanas.
En el presidium también estuvo la empresaria Altagracia Gómez Sierra, quién hizo referencia a la importancia de abordar las políticas públicas con perspectiva de género; la dramaturga Sabina Berman, luchadora de años de gran trayectoria artística; la académica feminista Marta Lamas, quien citó a la poeta Wislawa Szymborska: “sueño con el momento en que las feministas ya no seamos necesarias”; la activista por los derechos de las mujeres trabajadoras del hogar, Marcelina Bautista; así como la activista por los derechos de las mujeres víctimas de violencia de género, María Elena Ríos, entre muchas más, todas con palabras de emoción y entusiasmo.
El evento tuvo un cierre muy emotivo, una sorpresa, un regalo para todos los presentes: la compositora Vivir Quintana, con su guitarra, interpretó una composición especial para la ocasión: Compañera Presidenta. Una de sus frases más conmovedoras fue “necesito llamarte compañera Presidenta”, pues con ello hace un llamado a permanecer firme con los pies bien plantados, acompañada de hombres y mujeres que la acompañarán, la apoyarán para resolver los grandes problemas que afectan no sólo a las mujeres, sino a las y los mexicanos en general. ¡Que así sea!
* Secretaria General de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.