“Tan solo por la educación puede el hombre llegar a ser hombre. El hombre no es más que lo que la educación hace de él”…

Immanuel Kant

 

Si alguien esperaba “chipote con sangre” en la sucesión sindical magisterial de Tamaulipas, sufrió un chasco, aunque sea por ahora.

Fue una de las votaciones sindicales más apretadas de las que he sido testigo externo, No recuerdo en realidad en el Estado una división de simpatías tan pareja como la que se hizo pública al hacerse oficial el cómputo final. Pero también, pese a la cerrada votación y diferendos, una de las más tranquilas, por encima de denuncias y rumores sobre intentonas de manipulación que son parte normal de estas andanzas.

Ya debe usted conocer las cifras, pero considero importante remarcar lo cercanas que quedaron entre sí. Juzgue usted:

Planilla amarilla, encabezada por Arnulfo Rodríguez Treviño y ganador del proceso, 18 mil 904 votos con el 37.23 por ciento del padrón.

Planilla naranja, con Abelardo Ibarra Villanueva, 16 mil 687 votos con el 32.87 por ciento.

Planilla Blanca, Naif Hamsho Ibarra, 15 mil 173 votos con el 29.88 por ciento del listado.

¿Qué puede pasar con un magisterio tan dividido en cuanto a sus preferencias sindicales?

Todo. Y nada.

La aparente contradicción entre ambas circunstancias depende enteramente de Arnulfo. En un gremio tan politizado y sujeto a incursiones punitivas de diversos grupos de poder, el camino que recorrerá el virtual Secretario General de la Sección 30 estará sembrado de zancadillas, pero también de oportunidades de volver a construir por la vía de la conciliación el que antaño fue bloque monolítico en la vida docente de la Entidad.

El SNTE puede volver a ser, al margen de su vida laboral que debe ser prioridad para Rodríguez Treviño, protagonista electoral de primer orden o puede ser un cómodo actor más del reparto como lo fue Rigoberto Guevara con la administración estatal anterior. Como dije, de él depende.

Por lo pronto, la primera señal a su favor puede darse mañana, si confirma el gobernador Américo Villarreal su presencia en el ungimiento de Arnulfo. Mejor bendición política, imposible.

Sería una situación en la que los beneficios serían para ambos. Arnulfo mostraría que su llegada es vista de manera positiva en el primer círculo del poder estatal, mientras que el gobernador daría prueba sobrada de que los maestros son una prioridad para su mandato.

Por lo pronto, va una cauda de felicitaciones.

Una para Arnulfo por su victoria, evidentemente merecida.

Otra para sus contendientes, cuya madurez sindical es innegable hasta ahora,

Una más para los trabajadores de la educación, que cumplieron con la parte más importante: El voto pacífico.

Y por último, para el Gobierno del Estado, que no intentó meter las manos en el proceso magisterial y con eso dio mayor transparencia al mismo.

Buen inicio, parece…

DERECHO, EL PLATILLO QUE SE CUECE APARTE

Parece una facultad más de la UAT, pero no es así.

La Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de Victoria es un platillo que se ha cocido aparte en la historia de nuestra Alma Mater. Ha sufrido etapas de pesadilla pero tambien ha disfrutado tiempos de avance académico y tranquilidad, que por fortuna se mantienen con la rectoría de Guillermo Mendoza.

Me complace ver el resultado del proceso que llevó a Edy Izaguirre a la dirección de este plantel, no por él mismo, sino por la institución, que demostró que no sólo imparte conocimiento sobre las leyes, sino que también las respeta.

Fue una elección al margen de intereses patrimonialistas que en ocasiones anteriores varias veces se alejaron de la ley. Fue una elección apegada a la esencia de la escuela: Al Derecho.

Mis parabienes a su nuevo director, a sus maestros y a sus alumnos…

 

Twitter: @LABERINTOS_HOY