El equipo orquestado por el técnico Omar Quintero funcionó como una maquinaria sobre el tabloncillo del Coliseo de la Ciudad Deportiva de esta capital y finiquitó el éxito con marcador de 82-72, para quedar con balance de 3-0 al frente del grupo D de la región.
Los defensas Gabriel Girón y Orlando Méndez llevaron la voz cantante a la ofensiva con 23 y 19 puntos, respectivamente, además de cuatro triples per cápita de los 10 que en total encestó el conjunto norteamericano.
También dio disertación de un exquisito juego de pies bajo los tableros el pívot Daniel Amigo, autor de 15 cartones y 11 rebotes, para convertirse en el único jugador del encuentro en terminar con un doble-doble.
Por la causa cubana nuevamente el más sobresaliente resultó el delantero Jasiel Rivero, figura en el baloncesto español con el Valencia, sin embargo, sus 13 unidades y nueve rebotes quedaron por debajo de sus posibilidades y repercutió en el resultado de su plantel.
El momento definitorio del encuentro ocurrió en el tercer cuarto cuando los mexicanos hicieron gala de una magnífica puntería perimetral y endosaron siete triples para sacar una ventaja que llegó a ser de 15 puntos.
Apoyada por su afición en La Habana, Cuba desperdició una oportunidad inmejorable de alcanzar su primera sonrisa en esta eliminatoria y ahora se encuentra contra la pared con tres fracasos consecutivos, por lo que necesita a toda costa imponerse el domingo frente a Puerto Rico.
El elenco boricua, que este jueves cayó en Washington ante Estados Unidos por 76-93, también viajará a La Habana obligado a obtener un triunfo que los mantenga entre las tres selecciones del grupo que seguirán a la siguiente fase. Una vez concluida esta segunda ventana mundialista de América, restará la tercera y última de la primera etapa, a celebrarse en los primeros días del mes de julio.