Cancún FC se coronó campeón de la Liga de Expansión al vencer por 3-0 a Los Potros de Hierro del Atlante, en la que fuese su antigua casa el estadio Andrés Quintana Roo. Curiosamente el equipo de Cancún nació tras el regreso del Atlante a Ciudad de México.
Los equipos llegaban con posibilidades muy similares de conseguir el título ya que en el partido de ida empataron sin goles en el Estadio Azulgrana, sin embargo Cancún rápidamente mostró sus intenciones de ponerse arriba en el marcador u aprovechar la localía.
Fue apenas al minuto 8 cuando los locales se pusieron arriba en el marcador con anotación de Hassami Traoré, quien con una gran jugada individual desde el sector izquierdo terminó por mandar la pelota al fondo de las redes.
El desconcierto en Atlante era evidente, el planteamiento de Mario García dejaba un espacio entre el medio campo y la defensa al tratar de ser ofensivos, espacio que Cancún volvió a aprovechar para poner el segundo gol a favor al minuto 14.
Con el marcador adverso muy temprano en el partido, los visitantes comenzaron a mostrar nerviosismo y desesperación sin llegar a generar peligro en el arco defendido por Edson Reséndez.
A pesar de los cambios tempranos que Mario García hizo en su alineación para tratar de recomponer, el daño ya estaba hecho y Atlante nunca reaccionó.
Durante el segundo tiempo Cancún manejó el partido a su ritmo buscando incrementar su ventaja para dictar la sentencia condenatoria, fue al minuto 76 cuando tanta insistencia dio frutos y de nueva cuenta el jugador de Burkina Faso, Hassami Traoré, rompió el arco del Gansito Hernández.
Con este resultado las Iguanas consiguieron su primer título en tres años de existencia, el equipo dirigido por Luis Arce había sido súper líder del torneo regular y un firme candidato al título con un plantel lleno de jóvenes pero con algunos futbolistas experimentados como José Juan “Gallito” Vázquez.