Esto tras informar que en total sólo se habían inoculado un 46% de las dosis recibidas, y menos de un tercio en el caso de la red pública hospitalaria de la gran manzana, por lo que se tomarán medidas.

Durante la rueda de prensa, Cuomo pidió a las autoridades locales y en concreto, al alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, a “tomarse una responsabilidad personal con sus hospitales” porque hay un “problema de gestión y tienen que mover la vacuna más rápido”.

Además informó que todos los hospitales neoyorquinos deberán administrar todas las vacunas que han recibido cuando acabe esta semana, de lo contrario enfrentarán multas de hasta 100 mil dólares.

Por otro lado, si terminan los siete días para inocular las vacunas, y no se logra la meta, se desviarán las siguientes entregas a hospitales más rápidos, declaró Cuomo.